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Turismo rural comunitario en la Patagonia argentina

Valcheta es un pequeño pueblo de 5000 habitantes en la llamada “línea sur”, sobre la ruta 23 que une las playas del océano Atlántico con Bariloche, reconocidos atractivos turísticos de Río Negro. Su principal actividad económica, basada en la agricultura y ganadería, ha ido disminuyendo considerablemente en los últimos años. Es una zona poco conocida y fuera de los circuitos tradicionales de Patagonia, pero con un gran potencial para el desarrollo del ecoturismo, siendo una de las entradas a la imponente Meseta de Somuncurá, área natural protegida de 25.000 kilómetros cuadrados que comparte con la vecina provincia de Chubut.
Somuncurá (en voz araucana “piedra que suena o que habla”) es una altiplanicie basáltica con sierras que alcanzan los 1900 metros sobre el nivel del mar. Constituye un paisaje único formado hace millones de años cuando la Cordillera de los Andes se originó, donde podemos encontrar especies endémicas como la mojarra desnuda en el arroyo Valcheta, además de guanacos, avestruces, liebres, zorros y hasta pumas.
La Cooperativa de trabajo Valcheta Alen se formó hace casi 5 años por iniciativa de un grupo de emprendedores locales, con el objetivo de promover los atractivos naturales y culturales de la región y de esta forma crear una fuente adicional de empleo e ingresos para la comunidad local. Así fueron armando una red de familias rurales interesadas en recibir visitantes y compartir con ellos sus actividades diarias en el campo.
Como parte de nuestro proyecto por América Latina, tuvimos la oportunidad de pasar 6 días en Valcheta, colaborando con la cooperativa Valcheta Alen en el desarrollo de su propuesta turística. Visitamos el pueblo y sus principales atractivos, hablamos con los miembros de la cooperativa y otros actores locales, y revisamos sus actuales productos y servicios, para identificar los puntos fuertes y débiles, proporcionando algunas herramientas para mejorarlos.
La Cooperativa ha logrado poner en valor recursos de Valcheta como el Bosque Petrificado, hoy Monumento Natural, en el que los mismos miembros colaboraron para excavar y exhibir sus troncos milenarios. Sin lugar a dudas, la Meseta de Somuncurá tiene un gran potencial como atractivo turístico y siendo Valcheta su puerta de acceso, es una gran oportunidad. Además del circuito de 3 días y 2 noches que ofrecen, la cooperativa tiene un fuerte impacto social, organizando campañas para llevar alimentos, ropa y leña a las familias de la meseta. Las propuestas turísticas de la cooperativa producen un efecto multiplicador en el pueblo de Valcheta y alrededores, dando trabajo a pequeños alojamientos, mercados, productores y artesanos locales, y generando oportunidades para familias rurales que pueden de esta forma tener un ingreso adicional.
Javier Luquet, técnico en turismo y presidente de la cooperativa, afirma: “nos estamos movilizando para crear la red de turismo rural comunitario de Río Negro, en conjunto con otras redes que ya existen, como Cultura Rural Patagónica en Bariloche”. De esta forma y junto a la red nacional de turismo rural RATURC, pueden promover la oferta turística de estos pequeños emprendedores y darse a conocer a los mercados emisores.
El desafío ahora está en lograr desarrollar turísticamente la región en conjunto con el gobierno municipal y el resto de los actores locales y provinciales, muchos de los cuales todavía son reacios a colaborar entre sí para crear un producto homogéneo y empezar a promocionarlo. Ejemplo de esto es la falta de cooperación de parte de las autoridades municipales y la secretaría de medio ambiente para otorgar los permisos que requiere la cooperativa para operar circuitos dentro de la meseta. Otras áreas a mejorar a nivel municipal incluyen la limpieza del pueblo y la conectividad mediante transporte público ; un excelente recurso como el histórico Tren Patagónico que conecta Viedma con Bariloche, pasa por el pueblo sólo una vez por semana en cada dirección.
En cuanto a nuestras sugerencias a Javier y su equipo se destacan por ejemplo el desarrollo de circuitos e itinerarios concretos, el incremento de la visibilidad online a través de la creación de un sitio web completo, el uso de canales de comercialización, agencias de viajes e intermediarios específicos para ONGs, como Visit.org, para que puedan llegar a más mercados. A su vez, es necesario comunicar claramente las buenas prácticas que realizan, para que el turista sepa que su dinero se reinvierte en la comunidad local. Finalmente, la capacitación constante a las familias del pueblo y sobre todo a los jóvenes es clave para que encuentren oportunidades de trabajo y crecimiento profesional en el turismo.
La cooperativa continua trabajando para mejorar su oferta y crear más sinergias con los actores públicos y privados, con la convicción de que el turismo puede dar una nueva chance a Valcheta, actuando como herramienta para que sus habitantes valoren su tierra y no deban abandonarla.